“Aspiro a ser la ministra más votada para ser presidenta de la SCJN”: Loretta Ortiz

En entrevista con Pedro Gamboa, para MILENIO Televisión, la ministra explicó que visualiza su campaña electoral mediante redes sociales.

Pedro Gamboa | Foto Jorge González |Milenio |Ciudad de México / 14.11.2024 00:53:01. La ministra Loretta Ortiz, que contenderá en el proceso electoral para ser reelegida integrante de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), aspira a ser la más votada para poder presidir el máximo tribunal del país y afirma que tiene una profesionalización muy fuerte que le ha costado años, pues es doctora y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI).

En entrevista con Pedro Gamboa, para MILENIO Televisión, explica que visualiza su campaña electoral mediante redes sociales, a través de las cuales socializaría las sentencias que ha dictado como insumo para que los ciudadanos la prefieran a la hora de ir a las urnas, y descarta cualquier riesgo de partidización de la elección o de injerencia del crimen organizado.

—Partamos desde lo básico: usted, ministra, apoya esta elección.—

«Sí, sí la apoyo, totalmente. Democratizar la justicia nos va a ayudar al pueblo de México. Es algo que ya necesitaba el país, una administración de justicia que respondiera a los intereses del pueblo».

—¿Qué cambios tangibles podría decirle a la gente que se verán a partir de esta elección?—

«Con la reforma, no solamente van a tener el derecho de acceso a la justicia los que son poderosos, los que tienen dinero, sino toda persona».

—¿Cuáles son los puntos más importantes que usted considera se deben de cuidar con especial detalle para que la reforma, la elección, cumpla el cometido?—

«La ciudadanía va a votar, nos va a elegir. Van a ser los mejores perfiles, que no solamente tengan capacidad técnica, que tengan también contacto con la realidad».

—¿Usted aspira a ser la más votada, por ende, la presidenta de la Suprema Corte?—

«Yo aspiro a ser la más votada, sí, y también aspiro a ser presidenta de la Suprema Corte. Vengo de una preparación que me ha llevado años, no solamente la licenciatura, la maestría, el doctorado, investigadora SNI. Vengo de una profesionalización muy fuerte y la quiero poner en práctica al servicio público, o sea, una justicia al servicio de los demás».

—¿Cómo visualiza usted su campaña?—

«Teniendo contacto con toda la ciudadanía. Afortunadamente, ahorita existen las redes sociales, benditas redes sociales, entonces voy a tener contacto con la ciudadanía a través de las redes, pero pueden ser otros medios audiovisuales».

—¿Habrá trabajo de campo? ¿Recorrido por las calles?—

«Estamos a siete meses y medio de que se haga la elección y recorrer todo el país, no va a ser sencillo. Veo difícil que tenga el tiempo, porque además sigo siendo ministra de la Suprema Corte, es decir, que voy a ejercer mi función hasta la elección, y tengo los fines de semana únicamente para poder recorrer el país».

—¿Les han manifestado algo por parte del INE de cuáles serían los lineamientos para poder llevar a cabo esta campaña?—

«No, no tenemos unas reglas específicas, pero con nuestro trabajo y con las redes sociales y con nuestras sentencias, es la mejor manera».

—¿Qué la hace diferente a usted ministra respecto de cualquier otra ministra?—

«Siempre he estado preocupada, desde pequeña, por el acceso a la justicia. Tengo la preocupación por las mujeres, y en específico, las más vulnerables. He visto historias de violencia y acoso y quiero cambiar esta situación. De niños, niñas y adolescentes, he visto su maltrato. La trata de personas, de migrantes. He visto vulnerados sus derechos. Los adultos mayores, muchos, son sometidos a una situación de vulneración. Entonces, por ellos, desde que soy abogada aspiro a ser ministra presidenta de la Suprema Corte».

—¿Ve usted el riesgo de que se pueda partidizar la elección judicial?—

«No, yo no creo que se va a partidizar. Las personas van a tener un alto perfil, van a ser elegidas por sus méritos profesionales. No porque pertenezcan a un partido».

«Entre los principales argumentos de trabajadores del Poder Judicial, políticos, sociedad civil, contra la reforma judicial, dicen que se eliminan la división de poderes, ¿qué opina usted?»

«Es falso que se va a eliminar la división de poderes. Es como decir que nuestras garantías, el tipo de gobierno que tenemos, de una república federal y además soberana, va a desaparecer porque van a ser electos los integrantes del Poder Judicial Federal».
«Otro de los argumentos que señalan es que puede haber intervención del crimen organizado o de intereses particulares».
«Tampoco vamos a estar en una situación así, o sea, hay riesgos como en cualquier elección, pero se van a tomar las medidas precautorias suficientes».

—Esta reforma judicial nació bajo la premisa de eliminar los excesos en el Poder Judicial, las malas prácticas. ¿Tales prácticas sí son reales?—

Sí son reales y para eso va a servir, para eliminarlas. Vi violencia contra las mujeres, trata en el Poder Judicial Federal, tráfico de influencias, corrupción.

—¿Por qué si esas actividades tienen tanto tiempo, nunca se hizo nada?—

Todos se protegían. Es decir, decían ‘yo te protejo, tú cometes acoso contra una mujer, pero no digo nada, porque yo te hago el favor y tú me haces otro favor’ y así se la van llevando. O sea, todo se tapaban, todos.

—¿Cree que esa sea la razón por la que hay tanta negativa para esta reforma?—

Sí puede ser. Como consejera, me tocó un asunto. Yo le pregunté al magistrado en la audiencia que tuvimos: ‘¿qué me puede explicar? ¿qué me puede decir?’ ‘Usos y costumbres, consejera, usos y costumbres’, dijo.

—¿Y la elección mediante voto popular garantiza que no vuelva a suceder?—

Nos da los instrumentos a través del Tribunal de Disciplina. Ahora vamos a poder levantar denuncias con un tribunal superior. Hay mecanismos para incluso quitarnos el fuero político.

—¿Qué opinión le merece, qué perspectiva tiene, respecto de las impugnaciones ante instancias internacionales?—

En los acuerdos comerciales con Estados Unidos y con Canadá, no vamos a tener ningún problema. En el ámbito de los derechos humanos, tampoco, porque no se violan los derechos fundamentales, ni el acceso a la justicia, ni a la autonomía, la independencia.

—Usted fue fundadora de Morena en 2018, renunció a la militancia del partido para poder demostrar imparcialidad. Luego fue electa a la Suprema Corte. ¿Las personas pueden tener la certeza de que no habrá ningún tipo de influencia?—

Ninguna influencia. Soy independiente y autónoma y así lo he demostrado en todos mis votos.

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