Desde octubre de 2018 el presidente López Obrador fue advertido del negro historial de su colaborador Gabino Morales Mendoza. Tres años más tarde se convirtió en el superdelegado de la 4T con más denuncias en su contra por delitos de violación y acoso, amenazas y chantaje y desvío de recursos.
Desde octubre de 2018 el presidente López Obrador fue advertido del negro historial de su colaborador Gabino Morales Mendoza. La denuncia se hizo pública en un mitin en el centro histórico de San Luis Potosí, pero el mandatario lo impuso como su coordinador en ese estado. Tres años más tarde este representante del gobierno se convirtió en el superdelegado de la 4T con más denuncias en su contra (van ocho) por delitos que van de violación y acoso, pasando por amenazas y chantaje, hasta el desvío de recursos.
Por Guillermo Rivera|Foto: Twitter|viernes, 3 de septiembre de 2021|CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- Gabino Morales Mendoza es el funcionario del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador más poderoso en San Luis Potosí. Es el primer responsable de la organización y aplicación de los programas sociales federales en el estado; es decir, toma decisiones sobre recursos millonarios.
Al mismo tiempo es uno de los 32 coordinadores estatales –conocidos como superdelegados– que más denuncias acumula en su contra. Se trata de acusaciones por agresiones sexuales, amenazas, hostigamiento, violencia política de género, desvío de recursos y despidos injustificados. Estos señalamientos datan de 2013, cuando era presidente de Morena en la entidad, y de 2019, durante el primer año en su actual cargo.
El reportero obtuvo copias de dos expedientes de las denuncias en su contra por delitos sexuales. Una de las carpetas de investigación, con número CDI/FGE/I/D01/03570/19, se inició en la Fiscalía General de San Luis Potosí en febrero de 2019 contra Gabino Morales Mendoza y Luis Manuel Ruiz Guzmán por una presunta violación cometida el 5 de agosto de 2013.
El denunciante, militante de Morena, declaró que la agresión ocurrió en casa de Ruiz Guzmán, quien hoy es el enlace jurídico en la Secretaría del Bienestar.
En el expediente la víctima da detalles del abuso, y explica que cuando a Morales le reclamó por las agresiones, el hoy superdelegado le respondió que “no recordaba nada”.
En cambio, Ruiz le confirmó en persona que sí pasaron esas cosas que recordaba, “pero que quedaba entre nosotros”. El denunciante intentó olvidar el abuso, pero a mediados de 2018, con terapia psicológica, entendió que había sido víctima de violación. Dicha acusación no registra avances.
La segunda denuncia contra Morales se encuentra judicializada. Es la carpeta de investigación CDI/GFE/I/D01/02317/19, iniciada en enero de 2019 por la fiscalía por posibles delitos de abuso sexual y amenazas. Sin embargo, pese a que el caso se judicializó, Morales jamás se ha presentado a declarar.
El denunciante, quien en la entrevista prefiere identificarse como Fabián, acusa a Morales de hostigarlo sexualmente. En el documento detalla que conoció a Gabino a inicios de 2013, cuando comenzaba a militar en Morena. En los siguientes años, agrega, el comportamiento del acusado lo incomodaba; y en el documento denuncia dos supuestos hechos de abuso ocurridos en 2016.
Fabián narra que a finales de 2018 descubrió que otros compañeros de su partido también sufrieron algún tipo de abuso “laboral y sexual” por parte de Gabino.
El 9 de enero de 2019 recibió amenazas desde un perfil anónimo en Facebook. En la parte final de su declaración ante las autoridades asegura que teme por la seguridad de él y la de su familia. “Gabino Morales es una persona que tiene mucho poder por el cargo que actualmente está ocupando”.
Fragmento del reportaje publicado en la edición 2339 del semanario Proceso.