Su familia pide permiso a las autoridades para que sea incinerada, pues la joven de 19 años tenía miedo de ser sepultada
MARÍA DE LOS ÁNGELES VELASCO | TLALNEPANTLA | Excélsior |14:18 hrs. A unas horas de que llegue el cuerpo de Ana Karen, proveniente del estado de Hidalgo, donde fue hallado después de tres días de búsqueda al ser arrastrado por la corriente, su familia pide que le sea permitido incinerarla, pues la joven de 19 años de edad, tenía miedo de ser sepultada.
En tanto, su novio se encuentra aún hospitalizado ya que ingirió aguas negras y le hallaron una bacteria. Él se salvó porque se aferró a un poste.
En su vivienda en la colonia Lázaro Cárdenas, en Tlalnepantla, sus familiares y amigos esperan el arribó del cuerpo de la joven que según narró su papá, prefería estar en su casa que salir a la calle.
“Su novio la visitaba cada ocho días, estaban en su cuarto, cuando estaba con el novio no salía para nada, solo se ponían a ver películas ahí en el sillón se sentaban, ese día nos pidió permiso porque iba a ir a comprar una pizza con él, dijo que iba aquí a Río, no sé exactamente hasta donde fueron”, explicó Héctor Hugo García, papá de Ana Karen.
Con llanto, recuerda que esa tarde una fuerte lluvia azotó la zona y presuntamente para no ser regañada porque ya se había tardado, los jóvenes a bordo de la motoneta intentaron seguir hacia su casa que se encontraba a menos de un kilómetro y medio, cuando fue arrastrada por la corriente.
“Mi esposa entró a hablar con él, estaba en shock, como ido, reconociendo apenas y le pidió que lo perdonara que él nunca pensó esa magnitud, él no era de aquí, no sabía la magnitud de cómo baja el agua, la que conocía más era mi hija, pero yo creo que ella venía con el pendiente de que nosotros le fuéramos a decir algo por eso le dijo que siguiera, porque a lo mejor nosotros nos íbamos a molestar, si no llegaba”, añadió.
Así después de tres días de búsqueda de Ana de tan sólo 19 años de edad, su cuerpo fue hallado en Tula, Hidalgo a 80 kilómetro, de donde cayó.
Hoy con mucho dolor esperan a que por última vez llegue a su casa, pero desean que las autoridades les ayuden, pues Ana Karen, no quería ser enterrada.
“Nos decía que ella no se quería morir, no quería que se la comieran los gusanos, prefería la incineración, eso es lo que realmente queremos, que nos den la oportunidad yo creo que las evidencias están, no es feminicidio, no es nada”, apuntó.
En tanto, el novio de Ana Karen, quien se salvó por aferrarse a un poste, se encuentra delicado de salud.
“El novio ya tenía un problema de salud, principios de asma, nos comentan que no mejoraba porque había tomado agua contaminada, ahorita que tiene una bacteria por lo mismo del agua que tomó y sus padres lo trasladaron a un hospital particular de Huixquilucan para que lo pudieran ayudar”, concluyó.