Nadia Altamirano| Noticias |Vie, 08/27/2021 – 07:48 |San Juan Bautista Jayacatlán, Oaxaca.- Con la aplicación de 278 segundas dosis anticovid-19 de Sinovac a personas mayores de 18 años, este municipio concluyó su proceso de vacunación y oficialmente sólo tiene dos casos confirmados, pero las autoridades locales decidieron que el nuevo ciclo escolar se mantenga a distancia.
Con una hija en edad escolar, la regidora de educación, salud y deportes de este municipio ubicado a 61 kilómetros de la ciudad de Oaxaca, Dora Hilda Sandoval Flores, quisiera ser de las más interesadas en que las clases presenciales se den en este ciclo escolar 2021-2022, pero antepone el riesgo que ello representaría.
“Decidimos que siga a distancia, es difícil porque no se aprende igual, pero no es viable abrir la escuelas”, expresó sin titubear.
Ella, es de las primeras en desconfiar de las cifras oficiales que señalan que aquí sólo se han notificado dos casos y ninguna defunción, porque apenas el domingo pasado fue enterrado un hombre de 62 años cuya familia aseguró que fue de COVID-19.
La falta de pruebas para detectar el virus SARS-CoV-2 dificulta un panorama real del impacto de la pandemia. Sólo se cuenta con un centro de salud que carece de medicamentos y no tiene la capacidad para hacer pruebas de detección.
Sin pruebas para detectar SARS-CoV-2
Raúl Hernández Nava, un hombre de 30 años que este jueves recibió su segunda dosis anticovid-19 de Sinovac sospecha que seis meses atrás pudo enfermar de COVID-19, pero no fue al médico para cerciorarse.
“Tuve fiebre, dolor de cabeza y huesos, pero al médico no fui porque siento que no me pegó recio, normal, me tomé una pastilla de paracetamol y ya”, relató.
Un mes después, Onésimo, el papá de Raúl, también sospechó que enfermó de COVID-19 y tuvo que recorrer 32 kilómetros de terracería para llegar a San Francisco Telixtlahuaca, donde un médico particular lo atendiera.
Cuando logró hacerlo ya habían pasado todos los síntomas y el médico “le dijo que no era eso de la COVID”.
Presentarse de manera tardía a solicitar atención médica al Centro de Salud de este municipio es una constante que identifica su encargado, el doctor Juan Alejandro Hernández de la Rosa.
Además de que los recursos en infraestructura de salud son limitados y se carece de medicamento y no todas las personas cuentan con los recursos para buscar una prueba de SARS-CoV-2 de manera particular.
“Es poca la afluencia a la unidad de salud, a veces acuden a la unidad a la semana, cuando ya llevan una semana en remisión”, además de que desde junio pasado que la población volvió a permitir el acceso a personas que no viven aquí, los casos sospechosos se comenzaron a incrementar.
“No acudió a la unidad, pero llegó su familiar y me mostró la prueba con otro que parecer falleció, serían dos casos confirmados, pero muchos, unos 10, se quedan como casos sospechosos”, indicó.
Sin capacidad de atención a pacientes
La regidora de educación aseguró que justo hace un mes, cuando se aplicaba la primera dosis de Sinovac a personas mayores de 18 años recibieron la petición de una familia para trasladar a un joven de 20 años enfermo de COVID-19 que necesitaba oxígeno.
“Regresó, está en su casa y la va librando”, pero en caso de requerirse otro traslado la única ambulancia con que cuentan está en reparación.
Carmela Aquino Bolaños, una mujer de 51 años, a quien hace tres meses le diagnosticaron diabetes y debe tomar metformina se quejó de que no haya medicamento para ella, para personas con hipertensión o por picadura de alacrán, mucho menos para quienes enferman de COVID-19.
“Tenemos que comprar el medicamento y salir de la comunidad, cuando carecemos de personal de salud no hay quien lo distribuya, hace poco nos mandaron médico, pero no había”, detalla.
Ese miedo a un contagio y carecer de los medios para superarla, es lo que hace que la señora Cenobia Rivera Jiménez esté en contra de un regreso presencial, a pesar de la negativa experiencia con el ciclo escolar 2020-2021 que fue a distancia.
«A mi sí me gustaría que regresaran, porque por mi parte se atrasaron mucho”, principalmente su hija María Guadalupe de nueve años, quien todavía no sabe leer, por lo que pidió al director de la escuela primaria Renacimiento que no la pasara a cuarto grado.
“Sí hubiera querido que hubiera clases, pero igual con la situación que está tampoco se puede», contó con decepción, porque también debe ver que avancen sus hijos Rafael en quinto grado y Mauricio en segundo de secundaria, quienes “no se acuerdan de de nada de lo aprendido”.
Seis meses después de que en Oaxaca inició la vacunación, las renuencias entre las personas que tenían miedo a recibir una o dos dosis se han despejado, pero las posibilidades de un regreso presencial a las aulas aún es incierto con un semáforo epidémico en naranja (alto riesgo) y la limitada infraestructura para hacer frente a un aumento de casos.
Vacunación en Oaxaca
15 de febrero se comenzó a vacunar a las personas mayores de 60 años
2,030,000 dosis se han aplicado
108,615 unidosis CanSino fueron para personal docente
20 municipios de Valles Centrales iniciaron la aplicación de segundas dosis de Sinovac, San Juan Bautista Jayacatlán fue uno de ellos
2 casos de COVID-19 sólo tienen registrados los SSO en Jayacatlán, pero ninguna defunción
“Tenemos que comprar el medicamento y salir de la comunidad, cuando carecemos de personal de salud no hay quien lo distribuya, hace poco nos mandaron médico, pero no había”.Carmela Aquino Bolaños. Pobladora