Fue acusada de “exceso de legítima defensa”
Citlalli Luciana | Noticias |Jue, 07/29/2021 – 06:43. Roxana Ruiz Santiago, de 21 años de edad, originaria de Pinotepa Nacional, municipio de la Costa de Oaxaca, enfrenta una batalla legal por su libertad. Desde el 8 de mayo se encuentra presa en el penal del Bordo de Xochiaca, Estado de México acusada de “exceso de legítima defensa”.
La joven fue violada dentro de su casa y golpeada con la intención de asesinarla. En el forcejeo terminó dando muerte al agresor, relató Ana Santiago, madre de Roxana quien pidió al gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, ayuda para enfrentar el proceso legal y lograr la libertad de su hija.
“Si ella no se hubiera defendido, hoy estaría muerta”, señaló la mujer quien por sus bajos recursos no cuenta con el dinero suficiente para trasladarse de manera constante desde su localidad hacia el Estado de México.
Roxana Ruiz Santiago vivía en el Estado de México desde hace más de cinco años. Hace tres vivía sola luego de haberse separado del papá de su hijo.
A través de una carta publicada en la cuenta de Facebook Nos Queremos Vivas Neza, Roxana relató que, al terminar su jornada de trabajo, el cual desempeña como vendedora de papas en un carrito en Ciudad Neza, se quedó a platicar en la calle con unas conocidas quienes le ofrecieron una cerveza. Minutos después, cuando ella se disponía a ir a su casa, se unió un trabajador de una tienda de abarrotes ubicada en la misma zona, a quien sólo conocía de vista.
“Llegó cuando yo me estaba retirando, se ofreció a llevarme a mi domicilio que es muy cercano, cuando llegamos se puso necio, me obligo a dejarlo entrar, me insistió que vivía muy lejos que lo dejará quedarse a dormir en mi cuarto, insistió tanto que me asuste me dio miedo, por tonta accedí, sé que muchos me juzgarán por lo que hice, y tal vez dirán, es su culpa ella lo dejó entrar, estaba espantada, tenía miedo, lo dejé entrar, le puse una colchoneta en el piso, y le dije que ahí se podía quedar», escribió.
Relató que pasado unos minutos comenzó a atacarla física y sexualmente. Al defenderse -abundó- logró darle un puñetazo en la nariz y hacer que ésta sangrara. “Me dijo ahora sí te vas a morir».
“Sé que seré condenada por defender mi cuerpo, por defenderme como mujer, por haber castigado a mi agresor, por no haberme quedado callada, y por haber actuado. Ahora que estoy recluida me pongo a pensar que las leyes y la sociedad son injustas, tal vez debí dejar que mi agresor se saliera con la suya, se fuera y me dejara tal vez muerta o herida. Para no tener que vivir esto que vivo», indicó.
En su carta Roxana también indicó que en el momento de su detención los policías la insultaron, a pesar de que ella reconoció haber privado de la vida a su agresor para defenderse.
El caso de Roxana se asemeja al de Yakiri Rubio, quien el 9 de diciembre de 2013 privó de la vida a uno de sus violadores hecho por el cual fue acusada de exceso de legítima defensa y enfrentó un proceso penal con interpretaciones que lejos de reconocer la situación de vulnerabilidad, la revictimizaron.
