Evlin Aragón / Zona Roja / Oaxaca de Juárez, Oax., 3 de febrero de 2021.- Los continuos llamados al cuidado personal y colectivo quedaron cortos para crear conciencia en la población oaxaqueña sobre la necesidad de usar el cubrebocas, mantener la sana distancia y evitar lugares concurridos.
Lo anterior ha quedado de manifiesto con el aumento de festividades y eventos masivos, que ponen en riesgo no sólo a quienes los organizas y participación, sino a toda la comunidad.
El caso más reciente fue reportado en el municipio de Juchitán de Zaragoza, en donde elementos de la policía municipal cancelaron ayer la fiesta de aniversario en la colonia Mariano Escobedo, para lo cual había sido contratado un conjunto musical y adquirido alimentos para repartir entre habitantes de la demarcación.
La presencia de elementos de la Guardia Nacional que acompañaron a la seguridad municipal, causó molestia en la población que se negaba a suspender la actividad, pese a la prohibición existente en la localidad, incluso pidieron a la autoridad solventar los gastos que implicaría la cancelación de la festividad.
Debido a la oposición de las y los vecinos en la zona, quienes además trataron de intimidar a la policía al supuestamente llamar a una diputada local para obtener su respaldo, se decidió de común acuerdo permitir una hora de reunión con la intención de repartir los alimentos que ya habían sido adquiridos.
Minutos después de los hechos el munícipe de Juchitán, Emilio Montero, anunció que analizan el cierre total del comercio durante dos semanas en la localidad istmeña, debido a que enero se convirtió en una de los meses más letales, a causa de la pandemia.
TAMBIÉN EN CHOÁPAM
Lamentablemente no se trata de la única localidad; el caso de San Juan del Río de Santiago Choápam ha acaparado la atención, incluso a nivel nacional, toda vez que una tercera parte de la población resultó contagiada por Covid-19, tras la celebración de la festividad en honor al niño Jesús, realizada el pasado cinco de enero.
Fue el propio edil, Evergisto Gaboa Díaz, quien envió una carta al Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador para dar a conocer que al menos 400 personas habían sido contagiadas por el virus SARS COv2, 14 se encuentran hospitalizadas y 12 han fallecido.
Sin embargo, de acuerdo con los reportes y videos difundidos, el 5 de enero hubo una fiesta masiva, con conjunto musical traído de Veracruz, que animó a los cientos de asistentes, lugar en que se habrían originado múltiples contagios.
Así mismo, en días anteriores se reportaron festividades en Puerto Escondido, Santo Domingo Tehuantepec, Heroica Ciudad de Tlaxiaco, Santos Reyes Nopala, San Pedro Ixtlahuaca, Nazareno Etla y la propia ciudad de Oaxaca, donde la policía local suspendió una fiesta de XV años.
Mientras que en San Juan Bautista Tuxtepec y San Pedro y San Pablo Ayutla las celebraciones religiosas siguen representando un riesgo de contagio al concentrar a decenas de personas en los templos e iglesias con motivo de las festividades de la Candelaria, celebradas este martes dos de febrero.
Debido a lo anterior, el gobernador de Oaxaca Alejandro Murat Hinojosa, solo se ha limitado a recordar que es responsabilidad de la autoridad municipal mantener activas las medidas sanitarias emitidas a nivel nacional y estatal, incluidas la prohibición o regulación de eventos masivos.
Así mismo insiste en un llamado para no autorizar eventos que aglomeren personas, a fin de privilegiar la salud y la vida de la población, el cual parecía dirigirse a oídos sordos de una población a la que, a diez meses de la emergencia sanitaria, ya no le importa el contagio por Covid-19.