– Ni cómo detener el contagio de covid-19 que eso representa si se vive de su consumo. – Con más de 100 contagios y 6 muertes al día en las semanas recientes, la entidad se mantiene en color naranja con riesgo alto.
Juan López Sánchez |Barra Informativa| Oaxaca, 03 de enero 2021.- El turismo nacional y extranjero ha llenado los sitios icónicos de la capital oaxaqueña en los últimos días, lo que ha representado un riesgo mayor en los contagios de covid-19 que se han reportado en la semana que concluye.
Una muestra de ello es la tarde de este domingo 03 de enero, donde se mostró una importante movilidad en la zona centro de la capital, lo que es el andador turístico, el ex convento de Santo Domingo y el zócalo.
Pero cómo evitar la visita de los nacionales y extranjeros, si los gobiernos locales no cuentan con alternativas de apoyo para el comercio establecido e informal.
Se recuerda aquella idea de los primeros meses de la pandemia, dónde se mostró la incapacidad gubernamental para enfrentar la crisis económica que ya se presentaba sin respuesta alguna: «es mejor morir de coronavirus que morir de hambre».
Mañana lunes 04, se continuará con el color naranja del semáforo epidemiológico, no obstante que la situación hospitalaria, contagios y muertes exigen el color rojo.
Aunque la vacuna ya se presume como la salvación, lo cierto es que de nueva cuenta serán los más desprotegidos quienes la reciban al último.
Comento lo anterior por un episodio sucedido en días pasados, cuando un hombre de aproximadamente 35-40 años, le presumió a un prestador de servicio haber sido vacunado contra el covid-19, gracias a su amigo, el General de la 28 zona militar, quien le proporcionó el medicamento para él y su familia, no sin antes señalar que él, el militar, y su familia también fueron vacunados.
No es difícil de creer, conociendo el grado de corrupción que existe en todos los sectores del gobierno de los tres niveles, sin excluir a las fuerzas castrenses que en los últimos tiempos los quieren hacer ver como unos angelitos.
