Los padres de los niños cuyos cuerpos descuartizados un sujeto transportaba a bordo de un diablito en el Centro Histórico, ya habrían reconocido los restos.
Indigo Staff|Nov 4, 2020. Después de que en la madrugada del 31 de octubre elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) detuvieran a un sujeto que transportaba cuerpos descuartizados a bordo de un “diablito”, se sospecha que los restos pertenecían a dos niños.
El columnista Héctor de Mauleón reveló en su espacio que los restos mutilados podrían pertenecera dos menores de edad, Héctor y Yair.
Agentes de la SSC se hallaban montando un operativo en la esquina de República de Chile y Belisario Domínguez, para impedir que un grupo de motociclistas ingresara en el primer cuadro.
En medio de un paisaje solitario, el sujeto apareció empujando el diablito, lo que llamó la atención de los agentes, quienes lo vieron tirar dos cajas de plástico similares a las que usan en carnicerías y pollerías para trasladar restos del producto.
De las cajas cayeron tres bolsas de plástico negras, cuyo peso impedía que el sujeto que las transportaba pudiera maniobrarlas rápidamente.
Después de que una de las bolsas se rasgara, uno de los uniformados notó que del envase se asomaba un trozo de carne “muy blanca”.
Aunque lo dudó, una nueva mirada le confirmó que se trataban de restos humanos, pues vio un brazo, un hombro, y una oreja, por ello primeras versiones aseguraban que se trataba de un hombre.
Después de detener al sujeto, identificado como Édgar ‘Z’ de 39 años de edad, él confesó no conocer el verdadero contenido de las bolsas y cajas, pues le habían pagado con dos gramos de cocaína por tirarlas.
En días anteriores se lanzó una Alerta Amber, por parte de la Fiscalía de la Ciudad de México, para reportar la desaparición de dos adolescentes: Alan Yahir, de 12, y Héctor Efraín, de 14 años de edad.
Los dos menores de edad, pertenecientes a la comunidad mazahua, que desaparecieron el 27 de octubre, habitaban en el número 36 de la calle Pensador Mexicano. Fueron vistos por última vez en la esquina de Donceles y Allende.
Según testigos, un sujeto se llevó a ambos a bordo de una motocicleta.
De Mauleón revela, que tras la ejecución de Juan Miguel García Salas “El Rata”, quien había formado parte de la Unión Tepito y después de un grupo autonombrado como “La Anti Unión”, se supo que el sujeto se apoyaba en niños y adolescentes para realizar extorsiones.
Tres de sus ayudantes eran “El Maya”, “El Palillo” y “El Jair”, a algunos de ellos reclutados en una vecindad de la calle Pensador Mexicano.
