ROSALÍA VERGARA|Foto: Alejandro Saldívar|26 junio, 2020|CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El nombre del secretario de Seguridad Ciudadana (SSC) del gobierno capitalino, Omar Hamid García Harfuch, quien este viernes 26 sufrió un atentado, ha causado revuelo desde su nombramiento, en octubre de 2019, por sus lazos familiares, sus supuestos vínculos con el cártel “Guerreros Unidos” en el caso Ayotzinapa y por una supuesta investigación del gobierno de Estados Unidos.
García Hurfuch es hijo de Javier García Paniagua, quien fue titular de la Dirección Federal de Seguridad (DFS) durante la llamada “Guerra Sucia” en los años 70, y nieto de Marcelino García Barragán, quien fue secretario de la Defensa Nacional en 1968, año del movimiento estudiantil que terminó en la masacre de Tlatelolco el 2 de octubre de ese año.
En 2008, con 26 años de edad, García Harfuch ingresó como jefe del Departamento de Coordinación de Inteligencia de la extinta Policía Federal. Fue suboficial en Cuernavaca, Morelos y en 2013 ingresó a la División de Seguridad Regional de la Policía Federal, donde fue coordinador estatal de Guerrero.
Cobró notoriedad ese mismo 2013, cuando medios de comunicación locales publicaron que usó una aeronave de la Policía Federal para rescatar a su madre, la actriz María Sorté, quien estaba aislada en Acapulco, Guerrero, tras el paso del huracán “Manuel”.
Después participó en la formación de la División de Gendarmería. Fue titular de la División de Investigación de la Policía Federal, desde donde se encargó de atender delitos de alto impacto como el secuestro y la extorsión.
De acuerdo con un cable informativo divulgado por WikiLeaks, desde 2009 García Harfuch y 11 agentes de la Policía Federal eran investigados por el gobierno de Estados Unidos por presuntas irregularidades o actos delincuenciales. En 2010 había sido investigado por participar en un curso antipandillas en El Salvador, según esta información.
Asimismo, en 2012 fue condecorado dos veces al Mérito Policial Segunda Clase y, en 2014 al Mérito Policial Primera Clase.
En la edición 2089 de la revista Proceso, publicada el 12 de noviembre de 2016, se publicó que García Harfuch, quien en ese momento se desempeñaba como titular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la también extinta Procuraduría General de la República (PGR), tenía algún vínculo con los presuntos responsables de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, entre el 26 y 27 de septiembre de 2014.
Lo anterior porque uno de los presentados por la PGR como líder de Guerreros Unidos, de nombre Sidronio Casarrubias, habría tenido su nombre anotado como contacto en alguna libreta, la cual, se informó entonces, no había sido incluida en la carpeta de investigación.
En su papel de titular de la AIC, García Harfuch, encabezó los operativos para capturar a líderes de “La Unión Tepito”, “Fuerza Anti-Unión” y del “Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG)” que operan en la Ciudad de México.
Posteriormente, el 3 de junio de 2019, fue nombrado director de la Policía de Investigación en la extinta Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, mientras la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, padecía una crisis tras el secuestro y homicidio de Norberto Ronquillo y el asesinato de Leonardo Avendaño. Después de tres meses en el cargo, fue nombrado titular de la SSC.
García Harfuch es licenciado en Derecho, maestro en Derecho Penal por la Universidad Tecnológica de México. Tiene un diplomado Senior Executive in National and International Security por la Universidad de Harvard. Participó en el Seminario para el Desarrollo de Agentes del Orden del Gobierno de la República Mexicana, impartido por el Buró Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés), en Quantico, Virginia, y el curso Narcotics Unit Commanders Course, impartido por la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés).
Cuenta con formación profesional en el Centro de Formación de la Policía de España. Fue director general de Asuntos Policiales Internacionales e Interpol (Comisión Internacional de Policía Criminal) y jefe de las Oficinas Centrales Nacionales (OCN) de Interpol México, de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) México y comisionario jefe de la Policía Federal.
Fue representante de la Comisión Nacional de Seguridad del Centro Nacional de Fusión de Inteligencia del extinto Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen).
En 2018, fue reconocido con el Premio a la Cooperación Internacional por parte del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Vinculado a Ayotzinapa
El 16 de noviembre de 2016, madres y padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa entregaron un escrito a la Oficina Especial para el Caso Iguala de la Subprocuraduría de Derechos Humanos, en el que citan el reportaje “Inquietante liga del nuevo titular de la AIC con el caso Ayotzinapa”, publicado en la edición 2089 de Proceso, que reveló el nombre y teléfono de García Harfuch entre los contactos del supuesto líder de “Guerreros Unidos”, Sidronio Casarrubias.
La entonces Subprocuraduría Especializada en Delincuencia Organizada (SEIDO) habría presentado como pruebas, para solicitar la formal prisión por delincuencia organizada y portación de armas, por el que acusó a Covarrubias –y después fue exculpado por falta de pruebas–, estaba una libreta negra asegurada en octubre de 2014 donde estaba el nombre y teléfono del ahora funcionario capitalino, quien en ese momento era coordinador estatal de Seguridad Regional de la Policía Federal.
Esta prueba no fue entregada por las autoridades de ese momento al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) creado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para esclarecer el caso Ayotzinapa.
(Con información de Gloria Leticia Díaz y Sara Pantoja)