J. JESÚS ESQUIVEL|24 marzo, 2020| Foto: AP / Alex Brandon|WASHINGTON (apro).- En contra de la recomendación de un gran número de patólogos, el presidente Donald Trump anunció este martes que el próximo 12 de abril levantaría la cuarentena a la que están sometidos los estadunidenses para prevenir la expansión del Covid-19.
“Abriremos el país el domingo de pascua (12 de abril)”, destacó en conferencia de prensa en la Casa Blanca, en referencia al fin de la cuarentena nacional que prácticamente ha paralizado a ciudadanos y también la economía de los 50 estados de la Unión Americana.
“Debemos relajar las restricciones y abrir al país contra este enemigo invisible (Covid-19) al que derrotaremos; el domingo de pascua es un día muy especial y es nuestra meta para abrirnos”, subrayó Trump.
Horas antes, en una entrevista con la cadena de televisión Fox News, el presidente de Estados Unidos adelantó que pretendía anunciar el fin de la cuarentena para esa fecha.
La determinación de Trump de acabar con las restricciones económicas, médicas y sociales a las que están sujetos los estadunidenses, como medida para prevenir el contagio y expansión del coronavirus, provocó reacciones contrarias de epidemiólogos.
Por radio, televisión y la red de internet, connotados patólogos a nivel nacional e internacional se mostraron sorprendidos de que Trump pretenda acabar con las medidas de resguardo sanitario el 12 de abril, al considerar que una acción así sería muy prematura.
El ocupante de la Casa Blanca sostuvo que su decisión de acabar con las medidas de recogimiento obligatorio entre la ciudadanía estadunidense se sustenta en “datos duros”, pero no reveló argumentos factuales de que el Covid-19 estará prácticamente controlado esa fecha en la Unión Americana.
“Mi prioridad es garantizar la salud y seguridad de los estadunidenses. Con el Equipo de Tarea contra el Coronavirus evaluaremos los datos y tomaremos las decisiones”, acotó Trump, pese a determinar anticipadamente que la cuarentena llegará a su fin el domingo de pascua.
En Estados Unidos el contagio y propagación del Covid-19 ha dejado hasta ahora 675 muertos, en tanto que 52 mil 515 personas han dado positivo en la contracción del virus, según las últimas estadísticas del propio gobierno.
Anthony Faucci, director del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas y Alergias de Estados Unidos e integrante del Equipo de Tarea contra el Coronavirus, expuso un cuadro de salud pública alarmante por la magnitud del virus.
“El estado de Nueva York se encuentra en una situación muy seria, Uno de cada mil neoyorquinos están infectados y por ello deben de tener mucho cuidado en seguir las instrucciones de salubridad”, sostuvo Faucci en la Casa Blanca, parado junto a su jefe, el presidente Trump.
Nueva York está considerado como el epicentro del contagio de Covid-19 en Estados Unidos. Por decreto federal y de su gobernador Mario Cuomo, sus ciudadanos se encuentran relegados a un encierro domiciliario para contener la propagación del virus.
Faucci encomió a los neoyorquinos a contenerse de las ideas de querer abandonar el encierro e irse a otras entidades de Estados Unidos menos afectadas.
Cuestionado sobre si los médicos expertos como Faucci compartían su decisión de levantar la cuarentena el próximo 12 de abril, Trump se limitó a contestar que su plan fue discutido con sus asesores y que la determinación se ira cotejando con los datos duros del contagio.
También anunció que el gobierno federal ya tiene a la disponibilidad de la ciudadanía 8 millones de aparatos respiratorios para hospitales, 14 millones de cubrebocas y 2.5 millones de escudos faciales, entre otros productos médicos que ayudarán prevenir la expansión y contagio del coronavirus.
En tanto, el Equipo de Tarea contra el Coronavirus de la Casa Blanca volvió a recomendar a los estadunidenses que continúen instrumentando las medidas sanitarias, como lavarse las manos con jabón de manera constante, evitar salir a la calle y mantener la sana distancia.
Al tiempo que Trump hacía pública su decisión de acabar con la cuarentena nacional, el próximo 12 de abril, en el Congreso federal los legisladores demócratas y republicanos seguían negociando un paquete de rescate económico de emergencia de 2 billones de dólares.
En el Capitolio se aprestan a aprobar la inyección de esos recursos a la economía de Estados Unidos para amortiguar las pérdidas que provocará la pandemia en el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) por el aumento al desempleo y la caída en la productividad.
El fondo de rescate económico diseñado por Trump y los republicanos del Capitolio destinaría 500 mil millones de dólares para entregar alrededor de mil 200 dólares a cada ciudadano estadunidense que haya perdido su empleo temporalmente o de manera definitiva por el coronavirus.
El subsidio de entrega de dinero a la ciudadanía está planeado para dos fechas, el 6 de abril y el 18 de mayo próximos, e incluiría un cheque por 500 dólares para cada menor de edad ciudadano estadunidense.
Otros 350 mil millones de dólares de ese paquete se invertirían en subsidios a las empresas medianas y pequeñas que se han visto obligadas a cerrar sus puertas y a despedir a sus empleados.
Con el plan de recuperación de Trump, los grandes conglomerados se verían beneficiados con préstamos sin intereses para resarcir sus pérdidas por los efectos macroeconómicos negativos del Covid-19, y esos fondos saldrían de un paquete por 500 mil millones de dólares.
“Espero que pronto se pongan de acuerdo y aprueben el paquete para poder echar a andar a la economía”, declaró Trump, en alusión a que republicanos y demócratas concilien sus posiciones y saquen adelante el fondo de ayuda económica por 2 billones de dólares.