El embajador de México ante la ONU responde a pregunta de si nuestro país está preparado: “Yo quisiera pensar que lo estamos”; el también exsecretario de Salud llama a tomarnos muy en serio las recomendaciones internacionales y a cerrar filas; crucero italiano con enfermo de influenza genera inquietud; arriba a Cozumel, pero no podrá atracar hasta certificarse salud a bordo.
Por Sergio Ramírez|La Razón|27 febrero, 2020 7:58 am. Algunas personas se manifiestan contra el atraco del navío en Quintana Roo, ayer.
El embajador de México ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Juan Ramón de la Fuente, hizo un llamado a cerrar filas entre los Gobiernos federal y estatales, así como la sociedad en general, para enfrentar el brote de coronavirus Covid-19 que afecta a más de 30 países, pues “no hay duda que va a llegar a México y le va a pegar”.
“Más allá de las divisiones que pueda haber en el sector, éste es un punto para que cerremos filas porque lo necesitamos; nos va a pegar, no tengo la menor duda de que (el coronavirus) va a llegar a México”, afirmó.
En conferencia, el exsecretario de Salud federal dijo que la pregunta en este momento no es si va a llegar o no, sino cuándo lo hará y si estamos realmente preparados para enfrentar el problema.
“Yo quisiera pensar que lo estamos. Hay infraestructura, gente capaz, pero me parece que no podemos subestimar su importancia. Todas las precauciones son pocas”, apuntó.
De la Fuente consideró que México tiene dos ventajas: que la letalidad del virus es baja en relación con otros, aunque “eso no quiere decir que no se muera gente; sí se muere”. La segunda, explicó, es que conforme avance el año subirá la temperatura, lo cual frenará la pandemia.
El también exrector de la UNAM subrayó que mientras tanto hay que asumir que el virus que llegará a México y pegará a los ciudadanos, “y ojalá que el sistema de salud eche mano de la infraestructura, pero sobre todo, de los recursos humanos capacitados con los que cuenta”.
Rechazó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) haya tardado en lanzar la alerta por este brote, ya que advirtió desde un principio que era probable que se presentara esta pandemia, por lo que consideró que el organismo “en esta ocasión ha sido realmente implacable”.
El representante diplomático destacó además la actuación del Gobierno de China para hacer frente al brote, porque tuvo la capacidad de montar un cerco sanitario sobre 56 millones de personas, así como de construir dos hospitales en 15 días. Son experiencias, dijo, que debe tomar México.
Señaló que se debe voltear la cara a los aciertos y errores que pudieron cometerse para hacer frente a enfermedades como el cólera en la década de 1990 y la influenza AH1N1 en la década pasada.
“Quizá con la población hay que ser más enfático para decir: sí va a llegar, pero estas son las medidas que se están tomando, las desconozco con precisión, pero ahí están nuestros expertos, yo les confío mucho a ellos”, indicó.
NL TOMA PREVISIONES. El titular de la Secretaría de Salud de Nuevo León, Manuel de la O Cavazos, presentó a los medios de comunicación los trajes de protección para su personal médico.
“Es un traje completo, de mameluco, es impermeable y desechable, tiene sus botas, tiene doble guante. Tenemos ahorita en existencia 250 estamos próximos a adquirir más”, precisó el secretario.
En conferencia de prensa, detalló que dichos trajes, provistos de mascarilla N-95 y una cinta protectora que cubre el guante sobre la bata, los tienen desde 2014, mismos que tienen un costo de dos mil pesos cada uno y que, de ser necesario, se adquirirán los necesarios en caso de presentarse una infección en la entidad.
“Tenemos que estar preparados con el equipo de protección del personal porque algunos médicos o enfermeras (a nivel internacional) han adquirido esta enfermedad”, explicó.
Pese a que horas antes autoridades marítimas le había concedido permiso para atracar en Cozumel, Quintana Roo, el gobernador Carlos Joaquín aseguró que el crucero MCS Meraviglia no tenía tal y permanecería fondeado frente a la isla.
La embarcación provenía de Jamaica, donde la víspera no le permitieron atracar por la sospecha de que entre sus pasajeros se encontraba uno con síntomas de portar el Covid-19, lo que al final se descartó,.
“El crucero Meraviglia no ha sido autorizado a atracar en Cozumel; actualmente está fondeado (anclado) frente a las costas. Deberá ser revisado por los médicos de Sanidad Internacional, quienes verificarán los temas de salud a bordo. Si hay situación de riesgo en salud no habrá autorización para desembarco”; escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.
Antes, la empresa Mediterranean Shipping Company señaló en un comunicado que el pasajero padecía de influenza estacional (Tipo A) y que no estuvo en alguno de los países que presentan el brote.
Pese a ello, un grupo de isleños protestó contra el permiso de atracamiento y posible desembarque de los tripulantes del crucero, con bandera de Malta y que se dirige a Miami, Florida.
“Ya tenemos suficiente con el dengue”, señaló una mujer en una cartulina, mientras sus acompañantes traen cubreboca. “Fuera, fuera, fuera”, gritaron.
Las condiciones climáticas, como el alto oleaje y el fuerte viento, impidieron que el crucero se acercara a la isla.
Con información de Dévora Cordero