El incremento de casos de VIH en México y la reaparición del sarampión fueron tristes recordatorios de la prevención requerida en ambos casos.
JAQUELINE GUILLERMO|El Financiero|17/12/2019. Este año nos recordó en México de la existencia del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y del Sarampión, dos padecimientos que algunos creyeron en el pasado.
En lo que va del año en el país se registraron 8 mil 757 casos nuevos de VIH, de acuerdo con el Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y Sida (Conasida). Hasta el 11 de noviembre de este año se concentran 91 mil 078 personas diagnosticadas con este virus.
Quintana Roo lidera la lista de estados con la mayor tasa de nuevos casos de este virus con el 31.9 por ciento, le siguen Campeche, Ciudad de México, Colima, Veracruz y Tabasco.
De acuerdo con la científica Nora Gutiérrez, el incremento se debe a que “hay una falta de conciencia, principalmente los jóvenes a pesar de tener un poco de información se arriesgan a seguir manteniendo relaciones sexuales sin el uso de preservativo”.
“En los últimos años hemos visto que distintas asociaciones planifican campañas de información y detección, pero desgraciadamente aún está el tabú en la sociedad; se llega a pensar que por estar enfermo eres una persona sucia y se estigmatiza”, comentó la doctora.
En lo que va del año se han realizado 21 mil 611 pruebas, de las que 11.2 por ciento fueron positivas con VIH. Las estadísticas señalan que hay una mujer diagnosticada por cada 15 hombres, y el mayor número de casos corresponde a hombres arriba de los 30 años.
Sarampión, ¿una enfermedad que estaba en retroceso?
Hasta el 13 de noviembre de 2019 se tiene el registro de 20 casos de sarampión en México, 12 corresponden a mujeres, mientras que 8 son hombres; entre las causas más comunes del contagio se debe a viajes al extranjero y el contacto directo con personas que salieron del país y adquirieron el virus.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el sarampión revela el “fracaso colectivo” en la vacunación contra una enfermedad que estuvo en retroceso durante muchos años.
“El sarampión es una enfermedad prevenible, sin embargo nos encontramos aún con la falta de concientización en las familias mexicanas, quienes algunas llegan a considerarse ‘antivacunas’, o bien no le dan la importancia a las campañas”, señala el médico Bernado Campos.
Mientras que en un comunicado la doctora Kate O’Brien, de la OMS, mencionó que «la información errónea que se transmite a través de los canales de las redes sociales realmente está afectando las decisiones de los padres sobre si van a vacunar a sus hijos”.
Los niños pequeños que no son vacunados corren mayor riesgo de sufrir el sarampión y sus complicaciones. Las mujeres embarazadas sin vacunar también forman parte del grupo de riesgo. Sin embargo, puede infectarse cualquier otra persona que no haya recibido la vacuna y no haya sufrido la enfermedad.
Los expertos afirman que las campañas de vacunación han influido en la reducción de muertes por la adquisición de esta enfermedad, sin embargo aún falta mucho camino por recorrer, quizá no para eliminarla de manera definitiva, pero sí para reducir lo más que se pueda el contagio y con ello las muertes.