Luis Ignacio|Noticias|Emilio Morales Pacheco foto|Mié, 10/09/2019 – 10:13. El Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad de Oaxaca (STAUO) realizó ayer un paro de 24 horas en la máxima casa de estudios, por la jornada de lucha convocada por la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios de México (CONTU), a fin de solicitar a la Federación recursos para cubrir el pago de nómina de los últimos tres meses del actual ejercicio presupuestal 2019 y el pago del aguinaldo.
Solicitaron además un incremento al subsidio federal que reciben universidades públicas para 2020, pues en el proyecto de Presupuesto de Egresos para el próximo ejercicio fiscal registra una reducción del 4% en términos reales a lo asignado en 2019.
En el documento que los trabajadores universitarios entregaron a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la LXIV Legislatura federal señalan que merece atención especial la crisis presupuestal que enfrentan 9 universidades públicas, entre ellas la UABJO.
El secretario general del STAUO, Enrique Martínez, dijo que la UABJO está técnicamente en quiebra financiera y, como ya es costumbre, se pretende culpar a los trabajadores.
“Aunque siempre se trata de responsabilizar a los trabajadores, hay algunas declaraciones desafortunadas en las que se plantea que las jubilaciones y pensiones son las que tienen a la UABJO en esta situación, pero ya hemos dicho que los malos manejos administrativos, el desorden y caos financiero forman parte toral de los problemas que enfrentamos; además las jubilaciones y pensiones representan 40% del presupuesto, pero nadie habla de los recursos extraordinarios o propios que se reciben y nadie sabe en qué se aplican”, dijo.
Expresó que por esta razón la CONTU realiza el paro de labores para tener un diálogo con el gobierno federal que permita rescatar a las instituciones de educación superior, por lo que proponen crear un fondo para las previsiones salariales de 2020 y la recuperación salarial gradual de los trabajadores.
“El sindicalismo universitario plantea la necesidad de formalizar un programa de recuperación salarial. La creación de este fondo está orientada a la aplicación de una política salarial justa, para restituir, por una parte, la pérdida de nuestro poder adquisitivo en las últimas décadas y, por otra, fijar los porcentajes de incremento salarial de acuerdo con la inflación real del último año y no en la inflación proyectada del año siguiente”, apuntó.
Apuntó que otro de los problemas es la inviabilidad financiera de sus sistemas de jubilaciones y pensiones: “Los esfuerzos realizados en los últimos años a través de las reformas pensionarias y de la asignación de recursos federales, se reconoce que han sido insuficientes ante la magnitud del problema”.
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