AP|La Jornada|CIUDAD DE MÉXICO, 5 DE SEPTIEMBRE .— El cierre de la frontera entre México y Estados Unidos, la discriminación a inmigrantes y el tráfico de drogas son temas contemporáneos, pero no recientes. Una nueva película mexicana titulada “Sonora” sigue el peligroso viaje por el desierto de un grupo de personajes diversos, a principios de la década de 1930.
La cinta de Alejandro Springall, que se estrena el viernes en México, está basada en la novela “Camino del diablo” del mexicano Guillermo Munro. Recuerda una parte de la historia en la que miles de mexicanos fueron deportados y la frontera se cerró por orden del presidente estadounidense Herbert Hoover, mientras que en México había discriminación contra chinos asentados en el norte del país.
El actor Juan Manuel Bernal, quien da vida a un oficial mexicano que reprime a la comunidad china, lamenta que “no hemos aprendido nada”.
“La historia tiende a repetirse cuando no hacemos caso de ella”, dijo en una entrevista reciente con The Associated Press. “Es una metáfora de lo que sucedió en esos años, pero no está para nada alejada de lo que estamos viviendo hasta el día de hoy, 90 años después”.
En el filme, su personaje y una familia mexico-china a la que expulsó de su pueblo terminan en un mismo auto rumbo a Mexicali por la Sierra de El Pinacate y el Gran Desierto de Altar en Sonora.
“Me atrevería a decir que el desierto es la ruta hacia su propio camino”, dijo Bernal.
Para la actriz Dolores Heredia, quien da vida a una mujer muy católica en momentos en que esta mayoría religiosa en México acababa de enfrentarse con las autoridades en el conflicto armado conocido como Guerra Cristera, eso es precisamente lo que le gusta de la película: “No hay una sola visión, hay un solo camino y en él se van transformando cosas”.
Su personaje, Doña Rosario, emprende el camino por el desierto en busca de sus nietos, pues años antes abandonó a su hija cuando ésta se enamoró de un hombre que no la convencía por su color de piel oscuro.
“Su cabeza es un esquema de esa época y el personaje se va transformando, así le va pasando a cada uno”, dijo.
Pero el personaje de Bernal se vuelve cada vez más cerrado a pesar de estar obligado a convivir con aquellos a quienes discrimina, e incluso se le ve leyendo a Hitler sobre la superioridad de la raza aria.
“Era un personaje para mí complicado en el sentido de tratar de encontrarle humanidad… tratar de encontrar todas las pieles que están ahí abajo para entender por qué este odio recalcitrante hacia los demás”, dijo Bernal, para quien los supremacistas blancos continúan siendo un riesgo latente.
Springall conoció la novela de Munro por la actriz Giovanna Zacarías, quien se la recomendó cuando fue al desierto de El Pinacate en busca de locaciones para “La delgada línea amarilla”, otra cinta sobre un viaje en carretera para la que fue productor. Al conocer el lugar y la historia no se pudo resistir y convocó al estadounidense John Sayles (“Amigo”, “Lone Star”, “Silver City”) para escribir el guion.
“Es un gran guionista, gran director norteamericano, muy sensible a la relación México-Estados Unidos”, dijo Springall.
El actor mexicano Joaquín Cosio, astro de películas como “La dictadura perfecta”, “El infierno” y “Pastorela”, interpreta a Emeterio, un indígena de la nación Tohono O’odham encargado de guiar al grupo en su viaje por el desierto. Cosio es norteño y ya ha interpretado personajes de esta zona de México, pero el hecho de representar a un nativo representó para él un reto adicional.
“En algún momento me sentí con una responsabilidad muy extraña que no había sentido antes”, dijo el actor, quien describió a Emeterio como un hombre para el cual el desierto es parte intrínseca de su vida.
Springall y Cosío visitaron comunidades tohono o’odham en México y Arizona, donde se reunieron con líderes locales. Para ellos, El Pinacate es una zona sagrada.
“Había bastante seriedad y bastante firmeza en relación a lo que ellos son y lo que ellos cuidan”, dijo Cosio.
Las comunidades querían saber de qué se trataba la película y cuáles eran las pretensiones del director. Al final Cosio conoció a una pariente del personaje real en el que está basado Emeterio, y ésta le ayudó con sus diálogos en tohono o’odham.
Zacarías, quien también aparece en “Sonora”, da vida a Alma, quien se ve obligada a conducir el auto en el que viajan todos luego que su marido se enferma, en una época en que no abundaban las mujeres al volante.
“Es una heroína, es una mujer que es muy libre, dice lo que piensa”, dijo la actriz. Es una mujer que tiene pantalones, literal: maneja un auto”.