-Agencias de autos nuevos viven su peor mayo desde el 2014. -Política de austeridad gubernamental, despido de burócratas, sobreendeudamiento y un menor ánimo del consumidor profundizan la tendencia a la baja: AMDA.
Lilia González/El Economista/04 de junio de 2019, 13:07. La industria automotriz en México enfrentó en mayo pasado la caída en ventas de vehículos nuevos más alta desde marzo del 2018, al reportar una disminución de 11.3% —la mayor desde marzo del año pasado, de 13.4%— y colocar 101,939 unidades ligeras, que significan 12,994 autos menos comparados con el mismo mes del 2018, reportó el Inegi.
De acuerdo con las cifras, que son compartidas también por la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), la venta de autos nuevos en el mercado doméstico se coloca como la más baja para un mes de mayo desde el 2014, mientras que el tropiezo es el más pronunciado para un mes igual desde el 2009, año en que el mercado sufrió un desplome de 26.4%, el segundo mayor después de 1995.
“El fuerte descenso en la venta de vehículos observada en mayo confirma el escenario negativo para el 2019”, sostuvo Guillermo Rosales, director de la AMDA.
Las automotrices de venta por volumen como General Motors, Nissan, Honda, Toyota y Ford reportaron caídas de doble dígito, mientras que reportan pérdida de participación de mercado en el mercado mexicano.
Rosales afirmó que las restricciones en el gasto público y los despidos de burócratas registrados durante el arranque del gobierno de Andrés Manuel López Obrador son un factor que incide en el comportamiento negativo del mercado automotor.
Aunque la incertidumbre generada por la política de Donald Trump, presidente de Estados Unidos, de constantes amenazas a México, y ahora la eventual imposición de aranceles a todas las exportaciones se suman a los factores que inciden negativamente en la venta de autos nuevos.
La AMDA había estimado la venta de 111,638 vehículos ligeros durante mayo, cifra que quedó rebasada por el dato real, ante el endeudamiento de los hogares, explicó el directivo, merma la capacidad de compra en diversos rubros del gasto, entre ellos, la adquisición de un vehículo nuevo.
“Esta situación refleja cómo en realidad el sentimiento de confianza del consumidor, con niveles de avance importantes, no se ha concretado en una mejoría del mercado automotor”, lamentó el directivo de la industria automotriz.
Nissan, la armadora líder en ventas del mercado mexicano, enfrentó un descalabro de 20.8% durante el quinto mes del 2019, al comercializar 19,840 unidades, que le representa haber dejado de vender 5,214 unidades en comparación con el 2018.
Otra de las marcas con gran presencia y variedad de vehículos en nuestro país, General Motors, disminuyó 19.7% sus ventas durante mayo pasado, al pasar de 20,108 a 16,146 unidades; seguida por Volkswagen, que tiene el tercer sitio en ventas, y que cayó 3.3% en dicho mes, de 12,020 a 11,623 unidades comercializadas.
Coreana, con oxígeno
Aun cuando la industria automotriz mexicana comenzó su desaceleración desde el segundo trimestre del 2017, Kia Motors es una de las marcas que sigue ganado en el pastel de las ventas mexicanas.
La armadora coreana —con tan sólo cuatro años en el mercado doméstico— se consolidó en el cuarto lugar de ventas a nivel nacional, con una participación de mercado de 7.7 por ciento. Luego de colocar 7,852 unidades en mayo, la marca coreana tuvo un crecimiento de 6% en comparación con el mismo periodo del 2018.
En el acumulado enero a mayo del presente año, se vendieron 532,057 vehículos ligeros, lo que significa una caída de 5.4% en relación con el mismo periodo del 2018. El sector ha dejado de vender 30,279 autos respecto al mismo periodo del 2018.