-Va a haber justicia, ¡me canso ganso!. -AMLO: la masacre, resultado del cochinero que nos dejaron.
Alonso Urrutia/Enviado/Periódico La Jornada/Lunes 22 de abril de 2019, p. 3/Alvarado, Ver., Ante la jerarquía castrense congregada para conmemorar el 105 aniversario de la gesta histórica de la defensa del puerto de Veracruz en 1914, el presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que los 13 homicidios cometidos en Minatitlán, son una expresión del fruto podrido que se heredó de la aplicación de una política económica antipopular y entreguista.
En la solemne ceremonia celebrada en la sede de la Heroica Escuela Naval Militar, que sirvió también para la jura de bandera de 220 cadetes, López Obrador deploró este ataque que conmocionó a la entidad: duele mucho enterarse, tener noticias de estos asesinatos viles en Minatitlan.
El Presidente consideró que por hechos como ése se pensó en incorporar a las fuerzas armadas para resolver el problema grave de la inseguridad y de la violencia. Nos importa la defensa de la soberanía nacional, nos importa la seguridad interior, pero lo que más nos urge es garantizar la seguridad pública.
Recibido con salvas en la Heroica Escuela Naval Militar Antón Lizardo, el mandatario advirtió que todavía tenemos que enfrentar esta inercia, esa mala herencia, ese cochinero que nos dejaron. Cuestionamiento al que siguió su ofrecimiento de limpiar al país de la corrupción y la impunidad. Va a haber justicia ¡Me canso ganso!, afirmó sin desatar entre los militares y sus familias el furor que esta frase genera en las plazas públicas.
Entre las referencias históricas y las alusiones a la realidad actual ofreció que se va a serenar a Veracruz y al país en su conjunto, antes de darle un espaldarazo al gobernador, Cuitláhuac García –proveniente de su partido, Morena–, cuestionado en la entidad ante el recrudecimiento de la violencia.
Otra ventaja que tenemos enorme es que en Veracruz hay un gobernador honesto. Ya no es como antes, que el problema eran las autoridades, porque no había frontera, no se sabía dónde terminaba la delincuencia ni comenzaba la función de la autoridad.
Mucho elogio
Colmó al gobernador de elogios: Cuitláhuac García es inteligente, con convicciones y, sobre todo, honesto; un hombre bueno, no de malas entrañas, y eso importa para garantizar la paz y la tranquilidad.
A su llegada a la entidad, en breve entrevista anunció que este lunes encabezará una reunión en la que participarán el gobernador y los mandos militares para evaluar la situación de la seguridad, como en su momento ya lo hiciera en Nuevo León, Jalisco y Baja California.
A las alusiones a la honestidad le siguió la condena a la corrupción como fuente de todos los males del país, incluida la violencia. Eje medular en el discurso presidencial, también estuvo presente en esta ocasión: la corrupción política es la causa principal de la desigualdad económica y social, de la inseguridad, de la violencia, todos los males que nos aquejan.
Casi dos horas de un ritual militar para conmemorar la defensa del puerto, tomar la jura de bandera a esta nueva generación y condecorar al secretario de Marina, José Rafael Ojeda Durán, y al director general de Construcciones Navales, José Antonio Sierra Rodríguez, por sus 50 años de servicio. Ceremonia con remembranzas a la muerte digna de mejores causas. Se trataba de la reivindicación del comodoro Manuel Azueta y el cadete Virgilio Uribe, fallecidos en combate ante la invasión estadunidense de 1914.
López Obrador destinaría gran parte de su intervención a una explicación didáctica de las razones porque este puerto es cuatro veces heroico, incluida en la que participó el posteriormente defenestrado por la historia Antonio López de Santa Anna, hasta la frustrada intervención estadunidense en 1914, con pretensiones de proteger sus intereses económicos. Larga disertación histórica para concluir que en estos tiempos no se percibe ninguna agresión de algún país extranjero.
Pasó entonces a justificar la creación de la Guardia Nacional, a subrayar la importancia de que las reformas hayan salido de manera unánime y destacar que esto implicará incorporar a 220 mil elementos del Ejército y 60 mil de la Marina, sumados a los miembros de la Policía Federal.