Pese a las facilidades, mil 500 cruzan la frontera sin pasar por los filtros ; 2 mil 373 consiguen las tarjetas que los acreditan como visitantes por razones humanitarias.
Por Jorge Butrón/La Razón/19 enero, 2019/En Tapachula, Chiapas. El Instituto Nacional de Migración (INM) ha registrado en dos días a dos mil 373 centroamericanos que buscan obtener su Tarjeta de Visitante por Razones Humanitarias en el cruce fronterizo de Chiapas.
En conferencia, el comisionado nacional de Migración, Tonatiuh Guillén, informó que mil 933 son de Honduras, 262 de El Salvador, 150 de Guatemala; 23 de Nicaragua; cuatro de Haití y unos más de Brasil; entre ellos 431 menores de edad.
Además, otorgaron 10 tarjetas y se espera que en cinco días más, se entregue la totalidad de los registros; sin embargo, continúan entrando migrantes a la aduana fronteriza.
“Reconocemos que en especial en Honduras, El Salvador y Guatemala hay condiciones sociales de violencia y económicas que forzan la migración; y México se ha caracterizado por ser un país solidario”, destacó en las instalaciones del INM.
La tarjeta les permitirá, durante un año, trabajar y movilizarse en todo el país, mientras se regularizan o renuevan su visado.
Por su parte, David León, coordinador nacional de Protección Civil, comentó que el Gobierno federal está haciendo todos los esfuerzos para recibir a los migrantes, respetando sus derechos humanos.
Solanyi del Carmen Espinoza Valle, fue una de las primeras beneficiadas y aseguró que lo difícil del trámite fue la caminata, porque en México el trámite fue muy rápido.
“Lo primero es trabajar, pero mi sueño es llegar a Estados Unidos. Vengo con dos hijos y un primo, pero el objetivo es llegar a trabajar y después lo otro”, afirmó.
La tarjeta tiene como diferencia la Clave Única de Registro de Población; con la cual, tienen el derecho a seguridad social, empleo y más.
El panorama a comparación de 2018 es otro, ya que en la frontera no hay elementos de la Policía Federal, tampoco hay rejas y la entrada a México es controlada; a pesar de las largas filas de hasta seis horas para el registro.
El trámite para obtener la tarjeta, en un primer momento, es registrarse para obtener un brazalete; después, tomar una nueva fila para entregar el acta de nacimiento o identificación de su país de origen, para entrevistarse y esperar cinco días a que finalice el trámite.
A pesar de las facilidades para el ingreso al país, un grupo de al menos mil 500 personas, optó por saltarse los controles del INM y pasar sin registro por la aduana; con el objetivo de enfilarse al municipio de Tapachula.
Aunque no hubo conflicto en su paso, no cuentan con el registro obligatorio ya que se saltaron la política de migración; pero en palabras del titular de la institución: “Vamos a hablar con ellos para que puedan registrarse. No habrá regreso, pero si les conminamos a que se registren para llevar un control”.
Un nuevo sistema de registro estará vigente en Tapachula, para los centroamericanos que pasaron de manera ilegal por Ciudad Hidalgo.
Detalló que el programa es una de las estrategias de la administración federal para afrontar el problema de la migración. “Nos importa mucho el componente de regularidad, orden y seguridad”.
La creación del mercado laboral en la frontera sur, dijo, será una de las soluciones para quien desee trabajar con su nueva identidad.
Contrario a 2018, el río Suchiate se encuentra en calma sin ningún migrante queriendo pasar; no existen retenes humanitarios y las personas esperan pacientemente su turno para tener un lugar en México.
Trámites por una oportunidad
Centroamericanos hacen largas filas para obtener los papeles para su estancia legal:
Se registran para obtener un brazalete.
Se forman otra vez para entregar el acta de nacimiento o identificación de su país.
Participan en una entrevista.
Aguardan 5 días a que finalice el trámite.
